Tener una mascota no es cosa de niños. Es una responsabilidad en la que hay que cumplir una serie de obligaciones. Y no sólo hablamos de vacunar y visitar frecuentemente la clínica veterinaria en Torrejón de Ardoz, sino también de, por ejemplo, implantar el microchip a nuestros animales.

En la Clínica Veterinaria Cachorros recibimos todas las semanas algún anuncio de alguien que ha perdido a su mascota y pide la colaboración ciudadana para encontrarlo. Y siempre les decimos lo mismo. Que deberían haber implantado el microchip a su mascota porque es la mejor herramienta para tenerlo controlado en caso de pérdida o robo, ya que si alguien lo encuentra y lo lleva a la protectora o al veterinario, podrá ser identificado y devuelto a su amo en poco tiempo.

El microchip no es sino un sistema electrónico de identificación de animales, que se compone del propio microchip envuelto en una cápsula biocompatible y muy pequeña que no genera molestias ni alergias a la mascota. Es algo así como el DNI de un animal, que ha de implantarse en la clínica veterinaria en Torrejón de Ardoz por un especialista, que introduce la cápsula en la nuca del animal mediante un inyector.

Es recomendable esperar un par de meses antes de colocar el microchip al animal. Pero se trata de un proceso, a pesar del desconocimiento de mucha gente, cada vez más obligatorio en nuestro país. En España, la ley obliga a identificar a los animales de compañía, incluso a los gatos que no salen de casa y algunas comunidades ya obligan a implantar el chip o sistema electrónico, para que la información y datos queden registrados para siempre en la base de datos del Censo Canino que tiene cada Comunidad Autónoma.